lunes, 28 de enero de 2008

La Conciencia del Movimiento I parte


El gesto es más profundo que la palabra porque a través de él uno consigue a veces comunicar lo incomunicable.

Surge de un estado de abandono, de una escucha del corazón y de una originalidad profunda que nos mueve al igual que los árboles son movidos por el viento.

Se trata de recuperar la sabiduría instintiva del cuerpo que no se consigue sin silencio interior y un ritmo de vida de acuerdo a las leyes del equilibrio de la Naturaleza.


El pensamiento destruye la inteligencia del cuerpo y es a menudo el mayor obstáculo para encontrar en nosotros las directivas preciosas de una pantalla interior enmascarada a nuestros ojos. Es aquí donde cobra sentido hablar de un presente intemporal donde el ser humano puede vivir la plenitud al hilo de una perfecta momentaneidad de atención.
(revista Danza Oriental).


"...la parte rítmica del cuerpo la conforman el corazón y los pulmones. Por eso son esenciales para la danza la respiración y la escucha".
 

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